domingo, 2 de marzo de 2014

Pido tu calor.




Pido tu calor. Ya no soporto mi mente tan turbia y perturbante.

            Mi soledad se comparte de nuevo con una estrella, una vela y las lágrimas. Me escondo, me ovillo sin que nadie me vea… Tan sola me consumo. Y pienso en ti, en tu sexo. Tan raro y complejo, tan loco y espontáneo.

El reflejo de tu llama en mi ventana, verte consumir por el fuego que ilumina, cada vez queda menos de ti. Gotean lágrimas rojas, mancha el piso, llorando por ti. Sin definir colores. Tu afable voz llora en silencio. Te comprendo, te abrazo y te beso, te extraño. Sin voz te llamo, sin letras te escribo, sin ojos te busco. Sin corazón te amo. Con mi alma congelada te retengo, aquí y siempre te pensaré. Aquí yo y tú allá. Tú, lejos me piensas sin pensamientos, tú allá me extrañas sin sentimientos, sin conocer emociones. Sin vida, ¿Cuál vida?



No hay comentarios:

Publicar un comentario